Quizás fueron mis ojos inocentes.
Quizás mis rechazos parecieron afectarla.
Quizás fue mi mirada perdida. Perdida en otro contexto.
En otra idea.
En otra mujer.
En otro tiempo.
Quizás al ver mis ojos que seguían ese otro lugar con un anhelo incomprendido, la había devastado de manera incalculable.
Quizás Fue eso lo que le dolió.
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