El chicle, el pucho y la hoja.

Iba por Amunategui. Tranquilo. El frio me hacía caminar rápido. Miraba el cielo. Gran error. Nunca mires al cielo si caminas por las calles de Santiago. De repente, mi paso aminora. Siento que mi pie izquierdo no puede despegarse del suelo. Había pisado un chicle, ¿cómo la gente puede ser tan sucia?. No le presté atención. Seguí caminando como si nada, hasta que decidí investigar porque empecé a renguear.
El chicle había atrapado en su camino un pucho, una hoja, y resto de piedritas. Levanté la pata y contemplé por primera vez el desagradable espectáculo: El pucho: me hizo acordar a aquella vez que fume(pucho de chocolate),donde tenía la cabeza esa noche. No fumo no sólo por ser hijo de una familia no fumadora, también me parece estúpido. La hoja: me hizo recordar el otoño, una estación que no me va ni me viene. Las piedritas: me hizo acordar a las épocas en que jugaba fútbol en el parque de los reyes, donde todo era tan fácil. Pensar que todo eso por un puto chicle.

You can leave a response, or trackback from your own site.

0 Response to "El chicle, el pucho y la hoja."

Powered by Blogger